'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.

'Olé al salero y al tronío'

La enseñanza y el aprendizaje no sólo se da en las aulas. Una vez más el IES Alquipir ha dado muestra de su quehacer pedagógico y educativo trasladando el aula de música a la Casa de la Cultura de Cehegín. Esta vez el evento ha sido un 'concierto didáctico', un concierto escolar organizado por este centro educativo y que ha tenido en la figura de Victoria Cava la máxima expresión de la música en estado puro. Es habitual que se organicen conciertos escolares para los alumnos de primaria y secundaria, este año ha sido el IES Alquipir el que ha llevado la música a las aulas, o mejor dicho, las aulas al flamenco.

Victoria Cava es una chica joven, de tan sólo 23 años, antigua alumna de este centro, tal vez desconocida para muchos cehegineros, que es todo un ejemplo de esfuerzo, tesón y constancia para los jóvenes de hoy en día. Posee en su curriculum un envidiable historial académico. Tiene dos carreras universitarias, magisterio musical y periodismo, está cursando un máster, ha publicado un libro, y sobre todo, se dedica a aquello que más le gusta, la música, y en concreto el flamenco. En sus venas corre sangre de músicos, guitarristas, cantaores, que ven en la figura de Victoria a la artista que ellos han deseado ser, y que por circunstancias no han podido conseguir, pero todos se sienten contentos al verla actuar y desenvolverse en el escenario.

Eso es lo que Victoria Cava ha trasmitido hoy a los alumnos, que los deseos se pueden cumplir, que los sueños se pueden realizar, si uno persiste, si trabaja, si se esfuerza, si pone todo su empeño; pero también, ha trasmitido, ¡y de qué manera! el amor por la música, por la música trasformada en la Casa de la Cultura en fandango, en toná, en malagueñas, en sentidas cartageneras, en alegrías y en la guitarra alegre de unas bulerías. Durante una hora y media a manera bastante didáctica, no en vano, es maestra que sabe comunicar a los alumnos su sentimiento hacia la música, nos ha enseñado cada uno de los ritmos, nos ha introducido en la historia y evolución de cada uno de los 'palos', nos ha hecho vibrar con su 'zapateao' y ponernos de pie para entonar un 'tirititán tan tan' de sus alegrías, es decir, todos y en concreto los alumnos hemos aprendido algo más del flamenco y ha hecho que nos acerquemos a sus ritmos y a sus 'sentíos quejíos'. Nos ha enganchado a su música y a sus músicos, pues ha venido acompañada de unos excelentes intérpretes: un percusionista con su cajón flamenco, un violinista y un magnífico guitarrista, que ha sido la delicia de todos, y sobre todo y no me olvido, de una acompañante a las palmas, Carmen Alba, hermana de Victoria que lo ha hecho magníficamente.

Un olé por la cantaora flamenca ceheginera, pero un olé también por los alumnos, que se han portado estupendamante, pues han estado 'enganchados' a la música de Victoria, que han sabido estar al nivel de lo que allí hemos presenciado y sentido. ¿Quién ha dicho que a los jóvenes no les gusta el flamenco y la música de raíz? Y más si está interpretada por una chica joven, cercana a ellos.

Escrito por Maravillas Jiménez Sánchez.