Las pedanías cehegineras de Canara, El Chaparral y Arroyo Hurtado han dado por finalizados este fin de semana sus festejos, en honor a la Virgen de la Peña y a la Virgen de la Asunción, respectivamente.
Si alguna vez Canara tuvo unas fiestas dignas de la gran ciudad esa vez fue ésta, ya que la pedanía ha vivido los festejos más importantes de su historia. Tan sólo el nombre del pregonero, Manolo Giménez, hacía presagiar unas fiestas 'de bandera', tal y como fueron. Encierros, suelta de vaquillas y novillos, la primera corrida de toros de su historia, la actuación de Álex y Marian Conde, la simpatía de Marianico 'el corto' y el sorteo de un 'Mercedes' deportivo, que al final se llevó 'el madrileño', fueron los destellos de unas fiestas que aún brillan por encima del Santuario de la Virgen de la Peña.
Por su parte, la pedanía de El Chaparral celebró sus festejos en honor a la Virgen de la Asunción, en los que hubo actuaciones, eventos culinarios y religiosos, aeromodelismo, payasos y juegos infantiles, entre otros, prometiendo 'pregón' para el próximo año.
Asimismo, Arroyo Hurtado, que llevaba años sin celebrar sus fiestas, volvió a hacerlo, con diversión para los más pequeños, migas y una santa misa, que se convierten en la base de unas fiestas que vuelven a resurgir de sus cenizas con el fin de que no vuelvan a apagarse y a olvidarse con el tiempo.
FOTO: La exhibición de vaquillas, una de las claves del éxito de las Fiestas de Canara.