Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.

Si hay una persona feliz durante estos días, ése es Amador Moya, un artista adelantado a su tiempo al que ahora sus antiguos alumnos le rinden homenaje con la exposición colectiva 'Jugando a ser niños', que acoge el Aula Cultural de CajaMurcia.

Artistas de la talla de Cristino y Nicolás de Maya, Pedro López Chico, Jesús Molina, Pedro Antonio Abellán, María Semitiel, Juan Pedro Sáez, Juan Sánchez, Salvador López, Manuel Muñoz, Cristóbal Morales y Pepe Muñoz de Maya, entre otros, han colgado sus pinturas en el centro cultural, en una muestra que durará hasta el día 29 de julio, en la que se pueden apreciar los diferentes estilos y caminos que han seguido cada uno de sus aprendices.

Amador Moya estuvo muy por delante de su época. Cuando en Cehegín se sabía sobre pintura poco más que el uso de un pincel, Amador introdujo técnicas como el aerógrafo, que por aquel entonces era recibido con admiración e incredulidad. Todos sus alumnos, a los que tuvo el placer de formar hace ya 20 años, coincidieron en que el artista fue siempre más un amigo que un maestro, contando anécdotas que cada uno llevaban grabadas en su memoria.

Durante la presentación de la exposición, Pepe Muñoz de Maya aseguraba que 'cuando éramos niños, Amador nos montaba a todos en el coche para llevarnos a las exposiciones que había por toda la Región de Murcia. Fue siempre una gran persona'. Así, entre historias de juventud se daba por inaugurada la muestra, cuya visita es obligada para los amantes del arte y para todos aquellos que quieran comprobar lo importante que es haber tenido un buen maestro.

FOTO: Amador Moya (cuarto por la derecha), junto a sus antiguos alumnos.