Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

*

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario:

Dónde están los científicos

Teniendo en cuenta el alcance actual de la situación, nos encontramos con que el asunto se ha reducido a dos modelos para un mismo despropósito: abastecer de agua la ilegalidad, real y moral, sobre la que pretenden sustentar el desarrollo económico de la Región. Durante años, vienen jugando, habiéndolo prostituido, con un sano concepto como es el de 'desarrollo sostenible'. Pretenden confundir, y lo han conseguido, desde la Administración regional, mediante proyectos de mínimos conservacionistas, sometidos a su vez a reducciones progresivas, pasto de urbanizaciones aberrantes, asociando dichos mínimos al citado concepto que nada tiene que ver con aquella promesa de Valcárcel, emitida nada más ganar sus primeras elecciones, según la cual se acababan los tiempos del recelo ecologista por preservar la costa murciana quedando relegado para, como él vino a decir, abrir la mano en esa única dirección que el tiempo se ha encargado de confirmarnos. De otro lado, ¿qué han hecho, unos y otros, en los últimos 20 años, para controlar la hemorragia de cultivos de regadío, ilegales, que se han ido implantando? En este maremagno, donde prima la agitación de masas, subyace un tema de raíz claramente científica. En ese sentido, cabría preguntarse si las amenazas de un pasado no muy lejano, ejercidas sobre miembros reconocidos de la comunidad científica murciana, fueron lo suficientemente contundentes como para haber enmudecido a esa importante e imprescindible voz, incapaz de pronunciarse ante un asunto en el que deberían ser la primera y más autorizada voz que la sociedad murciana escuchase.

Dejar un comentario




(No será publicada)


Comentario: